La preocupación por el ambiente es un asunto que como empresa, más allá de cual sea tu sector o giro de negocio, no puedes pasar por alto. Es una prioridad no negociable que puede hacer la diferencia entre captar o no a un cliente. Ya no es solo una cuestión de reputación de marca, se trata de una variable de mercado.
Si ya eres una empresa muy amigable con el ambiente tendrás mucho camino recorrido. De lo contrario, deberías empezar a tomar medidas relacionadas con el reciclaje, el uso del papel y el agua y las emisiones de gases de efecto invernadero. Además, estas acciones no solo mejorarán tu imagen, sino que también aportarán ahorros a tu empresa ya que tendrás que invertir menos recursos en pagar las facturas de electricidad, agua o material de oficina. Ser responsable sale rentable.
Y si buscas inversionistas para ampliar tus operaciones, te tenemos otra buena noticia. Según la Alianza Global de Inversiones Sustentables (GSIA por sus siglas en inglés), los inversionistas cada vez se preocupan más de poner sus fondos en empresas que manejan criterios de sostenibilidad.
¿Por dónde empezar mi apoyo al medio ambiente?
Ahora ya tienes varias razones para unirte a la gran familia de las empresas sustentables. Pero si no sabes cómo empezar, te vamos a dar algunos consejos y acciones que pueden ayudarte para dar los primeros pasos.
Empieza el ejemplo desde dentro. Seguramente alguno colaboradores utilizan algunas veces platos y cubiertos plásticos para almorzar, imprimen y usan gran cantidad de papel y colocan el aire acondicionado cuando hace calor.
Un buen comienzo sería convencerlos para que separen los diferentes residuos como comida, plástico o papel y luego se reciclen, que usen plásticos biodegradables, que al finalizar su vida útil podrán ser plantados para integrarse nuevamente al ciclo de vida y controlen el aire acondicionado para impactar menos.
Un buen ejemplo de reciclaje es CocaCola México y otras embotelladoras, que invirtieron gran cantidad de dinero en plantas recicladoras que permiten procesar más de 90,000 toneladas al año. Entendemos que tu no tienes esa cantidad de desechos de ningún tipo, pero todo aporte, por pequeño que sea, ayudará a un ambiente mejor.
Se constante en tus acciones
Debes entender que reciclar, usar empaques sustentables, organizar jornadas de reforestación o construir edificios eficientes son medidas que ayudan a la conservación del ambiente. Pero estas acciones no deben ser tomadas por moda o de manera aislada.
Por tanto, es necesario que las asumas y las incorpores para que formen parte del ADN de tu empresa y cumplan con una máxima de la Responsabilidad Social Empresarial que es tener en cuenta a la sociedad. Y esta te va a exigir cada día más para consumir tus productos o servicios, que cuides el medio ambiente.
Ahora que ya sabes como ser más amigable con el ambiente empieza a ponerlo en práctica. Y no tengas miedo a hacer públicas tus buenas acciones en pro del ambiente. No tienes nada de que arrepentirte si estás aportando tu granito de arena para tener un mundo mejor de manera clara y honesta.
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